Autores, editores, distribuidoras y del hacha de sílex al misil

Esta tarde me ha tocado reunirme con  uno de mis editores para cobrar las cuatro perras de adelanto de una reedición ( y van no sé cuántas) de un clásico entre mis libros sobre el Camino de Santiago y sus mil misterios. Un libro que me han publicado distintas editoriales, varias de ellas ya desaparecidas.

La semana próxima estará en las librerías.

Al ir a sentarme en la pequeña sala de reuniones he podido notar un » aroma» acre, ácido, agridulce, cómo de cebolla en mal estado.

Al entrar he podido ver que, en la misma sala se hallaba cómodamente sentado un ex editor mío que marchó de España sólo empezar la pasada crisis dejando empantanado a todo Cristo. Incluso dejó a su mujer, que no esposa y a sus » camaradas» de partido y su  cargo municipal en un histórico grupo político dónde él siempre militó y que estaba ( ahora vete tú a saber cómo se hacen llamar…) muy a la izquierda de los socialistas, a los que , por cierto, odiaba más que  a la derecha.

 

Por él parece que no pasen los años. Su dejada barba, quizá algo más blanca, su abundante cabello, graso y más bien sucio, su vestimenta un tanto peculiar ( y no es que yo sea un dandy, ya que, al haber confianza he ido con pantalón corto y camisa color avellana) y ese » aroma» a estar a malas con el desodorante que siempre destacó en él.

Nos hemos saludado con cierta frialdad. Sólo le he preguntado cómo le iba por su americano nuevo hábitat.

Supongo que ambos hemos pensado lo mismo. Yo en catalán y el en castellano, y haciendo referencia al asco mutuo que nos tenemos desde siempre. Incluso siendo mi editor hace un par de décadas o poco más.

A los dos minutos han entrado mi editor y su secretaria, de hecho jefa de producción de la editorial. Tras firmar unos papeles y cobrar la casi calderilla correspondiente ( uno no es un Premio Planeta) hemos dejado el » Barbas» y yo las rencillas de lado y nos hemos puesto los cuatro, ellos tres con un café delante ( yo no puedo tomar cafeina desde niño, ni una  simple Coca Cola) y yo con una botella de agua mineral con gas, a charlar de lo que nos une, que es el mundo editorial.

Si hubiera sido de política hubiéramos salido a hostias .

El » Barbas» además de socio mayoritario en un conocido grupo editorial ya desaparecido o  actualmente» sincretizado» pero con otros socios era además en sus tiempos responsable máximo de una muy conocida distribuidora editorial a nivel nacional. O sea de toda España.

En ese momento hemos hecho un viaje al pasado dentro del mundo editorial.

Hemos hablado de los autores, editores y escasas distribuidoras actuales.

Recuerdo que, cuando apareció mi primer libro a la venta, de eso hace treinta y muchos años, en Barcelona había treinta y ocho distribuidoras editoriales y dos más cercanas: Sant Boi de Llobregat y Esplugues de Llobregat.

Las dos principales cerraron. La principal por temas fiscales y embargada y la otra por morosidad del propietario. Esta última era la de Sant Boi de Llobregat.

Actualmente hay en Barcelona sólo seis distribuidoras. Y dos de ellas están vinculadas o pertenecen a un todopoderoso grupo editorial que se pasa a los pequeños editores por el forro.

Tras mucho recordar hemos llegado los tres que vivimos en Barcelona, pues el » Barbas» lo ve todo desde la lejanía que supone tener el Atlántico por medio, a la misma conclusión

Vivimos unos tiempos en los que, en muchos casos ha de ser el AUTOR quién tire del carro para que su obra se venda más o menos bien.

Las tiradas de miles de libros de antaño ( offset) se han convertido muchas veces en pocos centenares ( digital) que se reeditan tal cómo se van agotando.

Muchos editores se estiran muy poco de cara a promocionar al autor. No TODOS, conste, pero sí muchos. Incluso conozco alguno que apenas lo hace por  ¿ antipatías personales’ ¿ malas compañías? ¿consejos de terceros? pero apenas se mueven por el autor. De hecho ni presentación de la obra en algunos casos. Y doy fe de ello

Por otra parte, pues si existe lo blanco es que existe lo negro, hay autores que, una vez publicada su obra se tocan el mondongo a la espera que sea el EDITOR quién les promocione y venda los libros, sin él apenas hacer más que ponerse » fardón» como autor en FaceBook o cualquier otro medio, pues ¡¡mola ser escritor!!!

Las pocas distribuidoras actuales pasan un » muy mucho» de las pequeñas editoriales, hasta el punto, y puedo dar fe de ello, de haber eliminado en muchos casos el IMPRESCINDIBLE servicio de » novedades» por el cual  las librerías recibían los nuevos títulos para ponerlos a la venta.

Incluso algunas topoderosas, aunque sí dan lustre a sus » vacas sagradas», al resto del rebaño casi lo marginan.

Tengo el caso de un estimado colega, caballeroso dónde los haya, y cuyo último libro adquirí hace poco, que, siendo un tema fascinante dentro del misterio, en ninguna, perdón, quería decir NINGUNAS, o sea NINGUNA ( tres veces, cómo San Pedro haciéndose el longui para que no le dieran caña por ir con su Jefe….), de las nueves librerías especializadas en estos temas  que quedan en Barcelona, tan siquiera han recibido un solo ejemplar de su muy interesante trabajo. Yo  lo tuve que adquirir por otro canal. Y conste que en las especializadas de mayor caché tengo descuento.

Resumiendo, cualquier parecido entre el mundo editorial que yo conocí antaño, y el actual, es cómo comparar al despreciable y para mí descerebrado presidente de los EEUU, Donald Trump (se pronuncia » Tramp») con su colega Abraham Lincon…

 

Cómo siempre digo, y seguiré diciendo, un libro debe de ser UNA SIMBIOSIS PERFECTA ENTRE EL EDITOR Y EL AUTOR.

 

Si falla este binomio ( perdón por el militarismo, pero así soy yo), o sea el editor se toca lo que no suena, por gandulería, dejadez. o por antipatía personal con un autor, o bien, el autor se cree que es Miguel de Cervantes y que su libro, en ocasiones el primero ( y último) se venderá solo pues eso es » cosa del editor», apaga y vámonos. Que por no quedar, casi no quedan mayoristas de saldos y fondos editoriales. tan abundantes en otros tiempos.

Aunque de ciertos autores, de ciertas » vacas sagradas» nunca los veamos saldar, pues al igual que para mi admirado Zafont existe un » Cementerio de los libros olvidados» para los fracasos de ciertas » vacas sagradas» existe la calle Pere IV ( un rey medieval de Aragón) en el Poble Nou… dónde » desaparecen» las malas inversiones editoriales…Pero de eso hablaremos en otra entrega. Incluso puede que ponga nombres, siempre y cuando tenga pruebas para demostrarlo…y así no me crujan…

Recuerde usted amig# lector,que, los escritores y los pequeños editores, aunque estemos en España, también comemos…

CARPE DIEM ( aunque sea casi la noche)

El autor

Periodista y escritor, mis pasos me han llevado a moverme por el mundo del misterio y de todo lo que tiene dos explicaciones: la ortodoxa y la heterodoxa

Cuando los años pasan y te sientes más «raro»

Será que este viernes llueve sobre Barcelona y me siento nostálgico o quizá algo filosofo.

Este mes he cumplido 64 tacos Aunque me encuentro muy fuerte. Mejor que muchos chavales de 25.

Hace algo más de tres meses me tuvieron que operar casi de urgencias y me he recuperado al cien por cien. Podía haber sido jodido si salía mal.

Buceo a pelo en el Cap de Creus ( Costa Brava), sin traje de neopreno o doble forro, pues soy casi inmune al frío ( constancia y años de preparación). Practico el » survival» y el » bushcraft». Con un cuchillo, un firesteel, mal llamado pedernal, unos metros de cuerda, mejor paracord, y un cazo me  gusta buscarme la vida en el monte.. mejor solo.

Pero  a mi edad, mi mayor aspiración es la TRANQUILIDAD.

Algo difícil cada mes para alguien que come de ser freelance  del periodismo y se dedica desde hace décadas al muy antipatriótico vicio de escribir y publicar libros. Tengo publicados casi tantos cómo años cumplo. Pero ningún best seller que me haya hecho rico. En ocasiones pienso que, si un super ventas editorial me hubiera de convertir en un ser » divinizado» y que pasa de los amigos, quizá mejor no haberlo escrito jamás.

Hablando de amigos, de éstos tengo pocos. Con una mano los puedo contar y me sobran dedos. De amistades bastantes. De compañeros un mogollón, y de conocidos más que corruptelas en un gobierno tercermundista. Ya escribí un post sobre este mismo tema en este blog.

Por suerte, eso sí, hace años que no tengo cargos de responsabilidad en publicaciones periodísticas o editoriales ( tampoco en el mundo uniformado, del que muchos hablan, pero nadie, sólo yo sé lo que es o no verdad). Eso me aleja de ese tipo de parásitos llamados » lameculos» que tantos he conocido en otros tiempos y tant incordian.

Mi esacasa familia la componen dos especies: la bípeda, o sea mi esposa y mi hija, y la de cuatro patas; hijos y nietos que maullan o que ladran. De la demás, que sin duda la hay, que el Diablo me los aleje, aunque ya lo he hecho yo hace décadas. No creo en las relaciones familiares impuestas. Sólo en las de cariño mutuo.

Ayer sin ir más lejos uno de los hermanos de mi mujer me pidió ¿ amistad? en FB y lo acepté, aunque no nos hablamos desde hace cuatro décadas. Supongo que tenía sueño, pues lo acepté. Hoy mismo lo elimino.

Mi vida social es escasa y cada vez más.

Mi esposa y yo nos hemos impuesto un cupo social consistente en algunas cenas con unos pocos amigos y amistades, y alguna birra con gente de mi especie mastológica.

Observo que a mi edad, y sé que le sucede también a otros, los días, semanas y meses, pasan con una velocidad de ciencia ficción.

Lo bueno es que paso  cada vez de más cosas.

Antaño, de joven me pegaba con los » pericos» o los escasos » merengues» que vivían en mi ya ancestral barrio del Poble Sec ( sí, era vecino de Serrat) para defender al Barça. Ya hace años que me la trae al pairo que gane, que pierda o que cambie de nombre el club » culé». Ya no digamos los demás.

Tengo fama de borde, y de allí el nombre de este foro. Pero soy un » borde» legal. De los que ayuda a quién cree que debe hacerlo. Más que mucho que va de » frateli», de solidario y que son más egoistas que la madre que los parió.

Dice una canción de mi exvecino Serrat que, » el Tío Alberto siempre tenía un plato en la mesa para quién lo quisiera». No es mi caso,. Lo tengo para mis amigos o mejores amistades, pero no para cualquiera.

Estoy muy fogueado para hacer el gilipollas.

Me encanta sentarme en ocasiones a birrear con amistades o demás, siempre y cuando no rezen mirando a la meca , sean podemitas o supremacistas en mi propia tierra. Mi incontinencia verbal, antes llamada sinceridad, siempre me ha perdido.

Pero a mi edad ¿ puedo cambiar? Ni puedo ni quiero. Así me hicieron y así soy

Todavía conservo cuatro pilares que son eternos para mi: Mi escasa familia de dos o cuatro patas, la Madre Naturaleza, incluído mi amado Mare Nóstrum  al que tan formidablemente cantó mi exvecino Serrat, los animales, eso es sagrado paa mi, y mi cainita y  cada vez más desmembrado país, al que amo: Espanya ( lo escribo en catalán, pues es mi idioma materno)

Reciban ustedes un saludo de este hombre que ve pasar las semanas cómo si fueran días…Y es que, cuando la «cosa vital» se termina, todo pasa más rápido.

Sigo escuchando las gotas de lluvia repicar en los cristales de mi despacho, junto a mis gatos y mis libros y con música de Kítaro en la cadena..

Feliz fin de semana. O no, eso ya es cosa de cada cual.

 

El autor

Periodista y escritor, mis pasos me han llevado a moverme por el mundo del misterio y de todo lo que tiene dos explicaciones: la ortodoxa y la heterodoxa