A finales de esta semana, estando yo algo lejos de la cada vez más anárquica Barcelona, ciudad a la que quiero con pasión, pese a su alcaldesa, me llamarán de uno de los programas de la COPE (¿sabrán que soy ateo?) para hablar de misterios y de mi último libro publicado que, por lo que veo, ha servido de inspiración para que algunos que están casi tan caninos cómo yo, se busquen la vida.
Ese mismo día me llamarán ¡¡joder, que los fines de semana son para bucear y estar en plena Naturaleza, cuchillo al cinto y firesteel al cuello, no para seguir con el curro!!! para hablar del mundo editorial según mi visión personal y siempre sincera y borde.
Hoy hablaba con un exeditor mío, librero veterano y exjugador de fútbol del segundo mejor equipo de fútbol de mi condal ciudad sobre el tema. Y, ha aparecido el nombre de una persona que, pese a su ilustre apellido, se carga todo lo que encuentra a nivel editorial. Pero eso es otro tema que dejamos en la reserva,
Espero que me pregunten sobre mis escritores preferidos.
Mi selección, pese a conocer personalmente a bastantes y apreciar sinceramente a varios, es clara y concisa.
La adelanto aquí para quién no escuche dicho programa que, por cierto, no creo que se pierda mucho
Aquí va mi » augusto» triunvirato de autores preferidos.
Le siguen un buen número de » legatus», tribunos, centuriones e incluso algún pobre decurión, sin olvidar a esos «optio» ( equivalente en la antigua Roma a nuestros alféreces) pero, que, por ser muchos, obvio en esta triada de mis autores preferidos.
El primero el cartagenero Arturo Pérez Reverte ¡¡qué pijo!!!Tan chulesco, algo cínico para mí (que en este mundo en que vivimos no deja de ser una virtud que yo practico hace décadas), tan borde ( y si lo digo yo, El Borde de la Frontera…), tan agresivo, según dicen, en su juventud. Siempre diciendo lo que le sale de los mismísimos, sin miedo a perder lectores ni amistades. Políticamente incorrecto y que no se la coje con papel de fumar.
Que a nadie le extrañe que sea mi escritor preferido.
Después de él, y siendo el Yin y el Yang del murciano, Santiago Posteguillo, sin duda. Leerlo es viajar al pasado y aprender Historia a una misma vez. Y, el tercero, el siempre afable, simpático y culto Juan Eslava Galán, aunque en algunos de sus libros se repite un tanto para mi gusto.
Pero su campechanismo, lejos del endiosamiento de algunos, lo hace ser persona apreciada por sus lectores. Sé lo qué me digo.
Mi trío de ases literarios y patrios. Cada cual en su línea, pero siempre en la Primera Línea editorial en mi bien surtida biblioteca.
Otro día hablaré de los que yo creo que son los peores, por copiones, lameculos o, por ser, además, » negros» de pobres incult@s que, sólo tienen grandeza en su cuenta corriente. Vaya usted a saber si aparecerán antiguos compañeros de mi menda lerenda, que, para lo que me queda en el convento…
Carpe Diem