Las iglesias redonda y el mito de su origen templario

El sol caía implacable sobre la árida comarca leridana de la Segarra aquel último domingo de agosto. Un pequeño autocar llegó junto al solitario templo de Sant Pere el Gros, situado a unos mil metros de la universitaria ciudad de Cervera y de él bajaron un alegre grupo de turistas provenientes de Barcelona. La persona que hacía las funciones de guía les dijo alzando la voz para ser oido por todos: Como ustedes pueden ver, este soberbio templo es totalmente redondo, lo que nos indica claramente que fue construido por los caballeros templarios.

Esta anécdota es real y la pudimos vivir personalmente hace algunos meses. Este “guía” no es la única persona que tiende a creer que todos los edificios religiosos redondos, por otra parte escasos, que hay en nuestro país, son de origen templario. En este caso, dicho templo leridano, uno de los más representativos y mejor conservados de dicho estilo en España, ya estaba construido como mínimo desde el año 1079 y formaba parte de un posible monasterio ( se pueden observar aún sus restos junto al templo), cuatro décadas antes de la fundación del Temple.

En diferentes puntos de la Península Ibérica nos encontramos con edificios religiosos, ermitas o iglesias, que tiene una forma circular, octagonal, o incluso en alguna rarísima ocasión, con doce lados, lo que les hace parecer, si no nos fijamos con demasiada atención, que son redondos.

Se tiende en general a considerar, de manera errónea, que todos estos edificios fueron construidos por, o para el Temple, lo que no se corresponde siempre con la realidad tal como veremos seguidamente.

   

     Toma de Jerusalén por los cruzados

Cuando a finales del siglo XI (julio de 1099) los cristianos tras prolongado y sangriento asedio conquistaban la sagrada ciudad de Jerusalén y pasaban por las armas a unos 50.000 sarracenos y judíos,sin distinción de sexo o edad, pudieron observar que, entre los monumentos más importantes de la capital bíblica se levantaba en el monte Moriah la Cúpula de la Roca, una rotonda cupular octagonal, inspirada en el bello arte bizantino, y que según los cristianos, era el lugar donde se había realizado la Presentación de Jesús en el Templo,por lo que la llamaron Templum Domini, y fue asignada a los monjes agustinos y consagrada el año 1141.

El otro gran monumento era el Anástasi ( del griego resurección) Rotunda,  más conocido como Templo del Santo Sepulcro,situado en el Monte Calvario, que desde su edificación en tiempos constantinianos, había sufrido dos grandes incendios, el del 614,y el peor, posiblemente provocado, en 1009, por lo que fue reconstruido el año 1048. Su forma era redonda.

Ambos edificios habían impactado por su simbología y tradición sacra, pero también por su construcción, en los rudos guerreros cruzados, y poco más tarde (1118), en los templarios.

Parece ser que quien difundió “académicamente” la idea de que todos los edificios religiosos de forma circular que existían en Europa eran obra del Temple, fue el gran arquitecto ( reconstructor de la ciudadela de Carcasona) y esoterista ( perteneció a varias sociedades secretas) Eugene Violett-le-Duc (1814-1879) en un polémico y romántico trabajo del año 1868, teoría que recibiría el espaldarazo pocos años más tarde ( 1872) del célebre historiador Adolf Dion.En España otro ilustre académico,  Vicente Lampérez Romea también asume más o menos dicha hipótesis, con lo que se generaliza no solamente en Francia, sino también en nuestro país y Portugal, y más tarde se extiende a otros países.

Con el paso del tiempo y los estudios más rigurosos y científicos de muchos historiadores se ha podido comprobar que muchos de los edificios que tiene tan peculiar forma,principalmente los redondos o circulares y que fueron edificados en la Europa medieval, no tienen un origen templario, aunque sí es verdad, que tanto los caballeros del Temple, como en menor medida sus adversarios y rivales los hospitalarios, edificaron en algunas ocasiones edificios de diferentes tamaños con forma circular, y  también, octagonal.

Según palabras del historiador Joan Fuguet y Sans, son muchos los investigadores que hacen responsables a los templarios de las iglesias redondas y las sitúan en los siglo XII y XIII,sin tener en cuenta las fuentes documentales. Un claro ejemplo sería la iglesia circular de San Marcos de Salamanca, que fue capilla real desde principios del siglo XIII ( aunque fue edificada casi dos décadas antes), y que algunos autores han querido convertirla en templaria, cuando absolutamente nada lo indica.

A esta aseveración hemos de añadir la teoría del especialista en arquitectura templaria hispana Castán Janaspa que asegura que no existió una unidad de estilos arquitectónicos dentro del Temple.

Lo que si parece ser cierto es que, los llamados Pobres Caballeros de Cristo, los templarios, sí tuvieron un interés especial en  crear templos octogonales, pero en cambio los de forma redonda o circular, son en la mayoría de las ocasiones anteriores, y en otras,muy posteriores (Puerto Frio,Granada, siglo XVIII).Como bien dice Rafael Alarcón, cuando los templarios se vieron en la necesidad de levantar sus santuarios, en lugar de emplear el modelo circular, utilizaron el poligonal. Para dicho investigador, la forma circular era más una concesión al aspecto exotérico que debía dar la orden de puertas para afuera, que una demostración de simbolismo esotérico, el cual sí se daba en las construcciones poligonales.Así lo demostraron al erigir sus edificaciones “oficiales” de París o Londres.

Entre los historiadores inconformistas que han tratado el tema, destaca con luz propia Élie Lambert que en la segunda mitad del siglo XIX consideró de forma un tanto aventurada, que “todos” los templos y ermitas circulares, tenían una función funeraria, lo que como veremos más tarde, no es realmente cierto.

Ciñendonos a nuestro país, podemos asegurar que los primeros templos redondos conocidos estaban situados en la llamada Marca Hispánica ( actualmente la Cataluña ) y poco después se extendieron a los territorios septentrionales aragoneses, y en la mayoría de los casos, se pueden considerar como un estilo postcarolingio.Uno de los ejemplos más antiguos es el de la iglesia prepirenaica de Sant Martí de Sull (Saldes), zona que dos siglos después sería “curiosamente” de dominio templario, y que fue edificada según se cree, el año 865 por un grupo de anacoretas de ambos sexos.

Cuando estudiamos los edificios religiosos españoles de forma circular, y queremos buscar una relación con los templarios,nos damos cuenta que tal como hemos dicho anteriormente, la gran mayoría estaban edificados antes de la fundación de la orden, pero en algunos casos,y por razones desconocidas, los caballeros decidieron construir algún tipo de edificio, o incluso una encomienda muy cerca de dichos templos, y uno de los casos más significativos sería el ya mencionado de Sant Pere el Gros y la primera encomienda que tuvieron los templarios en Cataluña, Granyena, muy cerca de dicho templo, o el misterioso y recoleto templo totalmente circular de Sant Adjutori, en la barcelonesa y turística sierra de Collserola, el cual en un principio se llamó Santa María o Mare de Deu del Bosc ( Madre de Dios del Bosque) y junto al cual, se han encontrado importantes restos ibéricos y romanos, lo que nos puede llevar a creer que está edificado sobre un templo pagano ( algo muy parecido sucede con la iglesia circular de Sta Cecilia de Torreblanca),y que está sospechosamente cerca de las fortificaciones que los templarios de la encomienda de Barcelona-Palau de Vallés tuvieron en dicha sierra ( castillo de Cedró, en Molíns de Rei, que también sería de los hospitalarios y la Torre fortificada de Abadal).

En una zona más alejada, pero de indicutible valor para el Temple, como fue el Camino de Santiago, nos encontramos que existió desde el siglo XII en Logroño un interesante templo con un doble cuerpo, octogonal y circular,  que fue derribado en el siglo XV y que se conocía como Nuestra Señora de la Rotonda, para convertirse con los siglos en Santa María la Redonda.

Hay una curiosa teoría defendida por algunos estudiosos como Enrique-Lorenzo Mozas y en menor medida por W.H.Witehylle que creen que estos templos redondos pudieron tener dos finalidades bien diferentes, pues mientras unos, los más “modernos” ( a partir del siglo XII) estaban basados en el Santo Sepulcro de Jerusalén, los más antiguos, habrían sido un intento secreto de extender y popularizar el culto mariano, no excesivamente enraizado en la Alta Edad Media debido a cierto sentimiento misógino de la Iglesia, que prefirió fomentar el culto a Dios, Jesúcristo o los santos, antes que a la Virgen, ejemplo, al fin y al cabo, de divinidad femenina.

 

Cuando el círculo y el octógono se fusionan:

Si diversos investigadores ven en estas dos formas la fusión de lo esotérico ( el octógono) o vieja tradición, con lo exotérico ( el círculo) o nueva tradición, es interesante comentar que en la Península Ibérica tenemos noticia de varios edificios donde la comunión entre el octógono y el círculo es casi perfecta, y que en muchos casos, pueden estar directamente relacionado con la orden templaria, pese a los ataques teóricos y “pedagójicos” que viene sufriendo esta teoría por parte de los sectores más ortodoxos.

Quizá el más famoso fue el de Tomar ( Portugal), con un cuerpo interior octogonal y uno de exterior de dieciseis lados, unidos por una bóveda circular.

En Zaragoza, la iglesia del Temple,edificada entre 1204-1208 y demolida en la primera mitad del siglo XIX ( Desamortización de Mendizábal), constaba de un cuerpo interior circular, y otro exterior octogonal.El nombre de una de las calles ubicada donde se levantó dicho edificio, aún nos recuerda su ubicación, calle del Temple.

En la comarca de Osona ( Barcelona), su industriosa capital, Vic, tuvo también un templo muy parecido, que los más ancianos aún recuerdan como “La Rodona” ( la Redonda). Se trataba de un edificio de dos cuerpos, el interior octogonal, y otro de circular, todo ello rodeado a su vez por otro también octogonal. Construido a mediados del siglo XII, fue derruido sin explicación lógica, al menos que sepamos, en el siglo XVIII.

Los estudiosos más ortodoxos curiosamente no ven relación alguna de dicha ciudad con el Temple, pero no hemos de olvidar que muy cerca, concretamente en la población de Vilatorta, los caballeros tenían como mínimo un estratégico castillo y un convento, el de Sant Juliá, y aún hasta hace poco, viejas leyendas se referían a ellos.Es más que posible, casi lo podríamos asegurar, que los caballeros tuvieran importantes posesiones meteriales en la capital osonenca.

 

Resumiendo:

Por un lado hemos visto que la mayoría de templos, ermitas e iglesias redondas, no tuvieron un origen templario, sino que fueron generalmente anteriores, pero también podemos ver que, en bastantes casos, el lugar donde habían sido edificados estos templos circulares, románicos o prerománicos en algún caso, los monjes guerreros tuvieron un extraño interés por poseer o estar cerca de dichos edificios.

Otra cosa muy distinta son los edificios multipoligonales: octogonales, de doce o dieciseis ( Tomar) caras, que sí parecen en la mayoría de casos, tener una clara y directa relación con la orden de los Pobres Caballeros de Cristo, por mucho que diversos historiadores, los más ortodoxos, estén empeñados en una verdadera “cruzada” por negar lo evidente.

A partir de ahora deberemos de pensárnoslo dos veces antes de conceder un origen templario a un edificio religioso por la sencilla razón de ser redondo o circular, pero tampoco  hemos de dejar de profundizar en la historia de dichos monumentos ya que, es posible que nos encontramos que “casualmente” los templarios estuvieron muy cerca de alguno de estos peculiares templos, o tuvieron algún tipo de relación con ellos.

 

 

Recuadro:

  

Quiénes fueron los “Hermanos constructores”

Desde el siglo X hasta bien entrado el siglo XI, en el Pirineo primero, y más al sur después, se empiezan a construir un buen número de edificaciones redondas, que algunos investigadores sospechan que pudieron ser fruto de los conocimientos de los misteriosos “Compañeros Constructores”. Aún se pueden observar la ya mencionada de Sant Pere el Gros (Cervera),Santa Cecilia de Torreblanca,Sant Viçens del Castell (Lluçá), Sant Pau de Bell-lloc ( La Roca del Vallés), esta última cercana a una zona templaria, Santa Magdalena de las Planes ( Besora), Sant Jaume (Santa María de Oló) y otras de las que solo queda el recuerdo, algunos documentos, y quizá algún resto físico invadido por la maleza.

Sobre estos misteriosos y muy poco conocidos “Compañeros Constructores” a los que muchos otorgan el honor de ser los “paters” del románico, el primer estilo arquitectónico nétamente europeo, se tiene muy pocas noticias, pero al parecer pudieron pertenecer a una sociedad o hermandad esotérica (¿originaria del norte de Italia?) que decidió dedicar su vida a extender sus conocimientos arquitectónicos por Europa para mayor gloria de Dios, y así Aymerich Lavaix asegura que “tenían como propósito quedar en el anonimato pues, creía que su nombre no podía figurar en obras destinadas a ensalzar la Gloria de Dios”. Beatrice Lane, incluso les adjudica el lema:Saber y Hacer.

No debemos de confundir a estos herméticos hombres, con los grandes constructores de catedrales románicas, de los que sí han quedado abundantes nombres y datos.

 

Recuadro:

También poligonales

Si bien podemos asegurar que la mayoría de templos redondos y circulares no fueron originariamente templarios, con los de formas poligonales, principalmente octogonales y de doce lados, es diferente, pues mientras los historiadores más ortodoxos aseguran que tanto Eunate, muy cerca de la importante encomienda templaria de Puente la Reina, como Torres del Río, ambas en pleno Camino de Santiago navarro nada tiene que ver con los Pobres Caballeros de Cristo, lo que es mucho suponer, pues tampoco saben decir con certeza quién los mandó construir, aunque hay diferentes hipótesis, la magnífica ermita de la Vera Cruz de Segovia, documentada como templaria desde el 13 de diciembre del 1208, es una de las más interesantes y misteriosas edificaciones templarias de España, con un exterior con doce lados, y un interior circular, expresando la conjunción entre lo esotérico y lo exotérico, y como síntesis de las dos edificaciones que tanto impactaron a los caballeros, la Cúpula de la Roca, y el Anástasis.Al hablar de un templo de doce ángulos o caras, no podemos olvidar que estos monjes-caballeros levantaron en Tierra Santa, y concretamente en su poderoso castillo Pelegrino ( o “ Chateau Pellegrí”), uno de los más importantes de la región,un templo de doce caras junto a otro de “clásico”.

El de Segovia es para el profesor de arte medieval Isidro Gonzalo Bango, un templo que quiere rememorar con su forma, la rotonda funeraria del Santo Sepulcro. También es verdad que otros estudiosos más conservadores creen que dicho templo no fue de los Pobres Caballeros de Cristo, teoría defendida entre otros por ejemplo por Martín Diez (1993), aunque es difícil de negar la relación directa entre esta hermética construcción con toda su simbología arcana y los caballeros templarios.

 

Recuadro:

El magníficamente conservado templo circular de Sant Miquel de Lillet (Bergueda, Barcelona) es un claro ejemplo de una relación a posteriori que pudieron tener los templarios y algunos templos redondos. Fue erigido en pleno feudo de los Lillet, uno de cuyos señores, Hug de Lillet, estuvo en Tierra Santa durante la Primera Cruzada,posiblemente junto con su vecino Hug de Pinós, y se encuentra muy cerca de donde vivió (valle de Frontanyá) el poderoso caballero templario Bremón de Cardona, uno de los señores que más ayudó junto a otro Lillet, Ponç, a construir el espléndido templo románico de Sant Jaume de Frontanyá, a poco más de  un kilómetro en línea recta de dicho templo redondo.

Este templo hasta hace muy pocos años, los historiadores más ortodoxos lo consideraban del siglo X o primeros años del XI ( aún se puede observar en la puerta de dicha edificación un cartel que así lo asegura), debido a una documentación que hoy ha quedado totalmente descartada, pues según parece, fue construido en el siglo XII ¿ tuvieron algo que ver sus vecinos templarios con el templo de Sant Miquel de Lillet?, ¿aprovecharon una construcción más antigua para edificar la actual?.

 

Recuadro:

Existe una curiosa y poco conocida teoría ( bastante “chauvinista”) defendida por unos pocos estudiosos, como Maurice Guinguande o Madeleine Truill,según los cuales, estos primitivos templos circulares( entre otras formas parecidas), pequeñas muestras de lo que sería más tarde el románico, pudieron tener sus orígenes en la región que más tarde se conocería como Delfinado (Francia), hacia finales del siglo X y principios del XI, debido a unos conocimientos astronómicos que los antecesores de los monjes Antoninos, los llamados Hermanos de la Limosna, habían recibido de Oriente,concretamente de Egipto ( cultos solares) país por el que siempre sintieron un gran interés, y al que viajaron en diversas ocasiones en busca “oficialmente” de las reliquias de su santo patrón.

 

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El autor

Periodista y escritor, mis pasos me han llevado a moverme por el mundo del misterio y de todo lo que tiene dos explicaciones: la ortodoxa y la heterodoxa